Un día en Almagro
Hola qué tal! Soy Jose Doctor, el creador de este blog dedicado al pueblo de Almagro. Aunque no resido en esta espectacular población llena de historia, vivo a tan solo 30 km, y desde que era un niño, recuerdo venir con mis padres muchísimas veces para hacer turismo en Almagro.
Esos recuerdos se te quedan marcados a fuego y no he dejado de visitar esta población siempre que nos apetece.
Lo bueno de vivir tan cerquita, hace que puedas decidir en unos minutos la posibilidad de viajar a Almagro, sobre todo, un sábado soleado, primaveral y sin prisas. Pues eso hemos hecho hoy mi familia. Hemos venido a pasar un buen rato, primero recorriendo sus calles y después disfrutando de la plaza mayor tomando unos refrigerios (unas cervezas calatrava) junto con unas buenas tapas y cazuelas de gachas, duelos y quebrantos, migas…
«Nada más aterrizar nos hemos encontrado con semejante postal del Museo Nacional del Teatro y mis hijos no han dudado en situarse para participar en la instantánea. Así da gusto entrar al pueblo.»
«Hemos continuado y nos hemos topado con el Teatro Municipal, el cual produce un fuerte impacto visual, destacando entre las casas que rodean semejante obra de arte. Aquí nos hemos detenido un ratito porque había una guía turística explicando algunos detalles interesantes sobre la historia del edificio y hemos puesto oído para ilustrarnos sobre lo que estábamos apreciando en ese mismo momento.»
«De camino a la Plaza Mayor nos hemos topado con este otro edificio donde se ubica la policía local y el centro de ocio de Almagro. Solo con ver esta fachada merece ser retratada y contemplada. No llevamos ni 500 metros desde que nos bajamos del coche y nuestros ojos no han parado de disfrutar con el paisaje.»
«Después de tirar unas fotillos, seguimos nuestro camino hacia la plaza, y justo, nos topamos con la Iglesia de San Agustín, un emblema de la población de Almagro. Es imposible no pararse frente a ella y contemplar cómo se levanta y protege el pueblo.»
«Y por fin!! entramos en la Plaza Mayor y alucinas, sí, alucinas de ver cómo algo así te puede atrapar tanto. De repente llegas a este espacio histórico en un día espectacular donde el viento agradable acaricia tu piel y no quieres irte de aquí.
Primero te encuentras con el edificio del ayuntamiento, que bien merece otra instantánea por toda la historia que alberga. Y así lo he hecho, no he podido evitar sacar mi teléfono y hacerme con unas cuantas imágenes.»
Nos hemos recorrido la plaza de arriba a abajo varias veces, inmortalizando algunos momentos familiares para el recuerdo. Así hacíamos hambre y sed 😉
Y eso, que nos hemos retratado un poquillo en familia. Además hoy coincidía con el día de la familia. ¿Qué mejor ocasión?
Museo Nacional del Teatro
Y bueno, después hemos visitado el Museo Nacional del Teatro de Almagro, donde hemos disfrutado de un agradable recorrido por la historia del teatro. Aquí os dejo unas instantáneas. No dejéis de visitar el museo cuando viajéis a Almagro.
¡Un alto en el camino!
Después de esta apasionante visita al museo recorriendo la historia del teatro español, nos hemos ganado el derecho de un buen aperitivo manchego, regado de unas calatravas y unas fantas para los gorriones, jejeje…
La gran oferta que existe en la plaza, hace que cualquier terraza sea la elegida para disfrutar de nuestra maravillosa gastronomía y del solecito.
Seguimos de turismo por Almagro
Después de repostar como buenos manchegos, hemos tomado camino hacia el Parador Nacional de Almagro, un lugar único y con mucho magnetismo, solo pasar por su entrada hacia el antiguo convento, te envuelve. Y durante el trayecto hemos visitado lugares que llevan en pie desde el siglo XVI.
¡Y llegamos al Parador Nacional de Almagro!
Y por fin llegamos a nuestro destino para tomar un buen café y un poquito de agua con gas mientras disfrutábamos de un jardín ¡solo para nosotros!
Un Sábado en Almagro muy divertido
Y esto ha sido todo amigos. Hemos disfrutado de un Sábado muy agradable en Almagro y de este día especial de «la familia». Muy aconsejable viajar a esta población con tanta historia y disfrutar de su plaza mayor.
Merece la pena venir un día a Almagro y simplemente pasear por sus calles, otro día hacer una ruta por conventos, iglesias, corral de comedias. Su oferta cultural y gastronómica, son motivos suficientes para venir una y otra vez.
Que seas muy feliz!! Un abrazo.
Jose.
